patatas a la importancia

Sí, un plato un poco extraño para las temperaturas que nos están invadiendo últimamente, ¡pero es que me sientan súper bien las patatas! Tengo que andarme con ojo porque como siga por este camino voy a engordar 20 kilos de aquí a que nazca el bebé. 

De todas formas, aquí las tenéis. Una gozada de guisito de patatas enharinadas y fritas previamente. Muy poco light y un poco aparatoso, pero de un sabor.... ¡ñam!


Ingredientes:

• 4 patatas grandes.
• 1 cebolleta.
• 1 huevo mediano.
• 2 dientes de ajo.
• 100 grs de harina.
• 100 ml de aceite para freir.
• 500 ml de agua.
• 1 puñado de perejil fresco (picado).
• 1/2 cucharadita de sal.

  

Elaboración:

1. Pelamos, lavamos y cortamos las patatas en rodajas de 1 centímetro de ancho. 

2. Las pasamos por harina y luego por huevo, y las vamos friendo en el aceite ya caliente (¡gracias por la corrección, Edurne! Resulta que yo lo hice al revés, pero en la receta tradicional va en ese orden). Las colocamos en otro plato sobre papel de cocina para eliminar el exceso de aceite. 

3. En una sartén honda calentamos un poco más de aceite y sofreímos el ajo picado, la cebolleta picada y el perejil. Añadimos una cucharada de harina y removemos hasta que haya disuelto completamente. 

4. Añadimos el agua, la sal y por último las patatas. Lo dejamos en el fuego hasta que rompa a hervir y bajamos el fuego, tapamos la sartén y dejamos que cueza a fuego lento durante 20 minutos.

Tenemos que recurrir más a menudo a la cocina tradicional, porque yo cuando lo hago redescubro unos sabores que pa qué. En serio, ¡no dejemos que se pierdan en el olvido! ¿Qué tal un día del guiso en Twitter...? ;)